La Universidad no está contribuyendo demasiado al análisis riguroso de la actual crisis. Con el tratamiento periodístico o blogero, la prensa ha capitalizado el debate, de marcado tinte político.
Por eso, es una buena noticia la celebración del seminario sobre «La crisis financiera: soluciones europeas» que organizó el Grupo de Investigación de Excelencia en Economía Financiera y Contabilidad de la Junta de Castilla y León. Asistí este viernes a la jornada de clausura en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de León.
El catedrático Enrique López ha sido de los primeros en hacer un análisis desde la perspectiva de su disciplina contable, que hemos presentado en otra entrada de esta bitácora. Ahora que todo el mundo se apunta a gurú de las finanzas, debo confesaros que en diciembre de 2007, comentando una serie de cuatro artículos que acababa de publicar sobre las Cajas de Ahorro, me dijo textualmente «¿Crees que habrá corralito en España cuando estalle la que se está preparando?». No lo he olvidado porque estuve muy preocupado durante días.
En la prensa leonesa, la reunión que dirigía era presentada por Enrique con un símil muy pedagógico:
Una crisis financiera no resuelta es el equivalente económico de una bomba de neutrones. Después del estallido quedan intactos los edificios y las fábricas, la riqueza física, pero desaparece la actividad económica …
Como reconocía el Director General de Caja España en la inauguración: «tenemos muy pocos proyectos de inversión para financiar”. Aunque el Ministerio de Hacienda reclama «arrimar el hombro» a las Entidades financieras.
El catedrático de Valladolid, Valentín Azofra, presentaba una conferencia con las características de su área de conocimiento: las finanzas: alto nivel de dependencia del ladrillo, estratosférico déficit exterior y endeudamiento del sector privado. Nos olvidamos de que lo financiero era un medio para el sector real de la economía y para caricaturizarlo, puso el video de los Long John.
El catedrático de Salamanca, Julio Pindado, analizó las dificultades de las empresas para sobrevivir en esta crisis. Las empresas familiares, tan abundantes en nuestro tejido económico y social, tienen fortalezas innegables, que fueron también estudiadas en su presentación. «Las empresas familiares están mejor preparadas para tiempos de crisis. Tienen estructuras más flexibles y están más comprometidas con la sociedad, con su tierra«.
En opinión de Pindado, las empresa familiares «están dispuestas a estar en la actividad, por ejemplo, un par de años sabiendo que no van a hacer un negocio boyante, pero tienen como consigna unos valores, tienen como consigna dejar ese negocio en mejor situación a sus hijos». «Una multinacional no tiene estos incentivos y si vienen malos tiempos se van a otra parte donde la mano de obra es más barata», afirmó el también Director de la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidad de Salamanca.
El profesor Roberto Fernández Llera, describió en su exposición la situación de las distintas Administraciones Públicas. La mayoría de las autonómicas y locales, excepto el Estado, se han excedido con mucho en los gastos realizados por encima de sus capacidades de ingresos, endeudándose para muchas generaciones, lo cual en si mismo no es malo pues estos también disfrutarán de muchas infraestructuras. La caída de la actividad y el menor ritmo de la construcción han impactado de forma directa en los ingresos públicos, que van a tener que incurrir de forma generalizada en déficit. El Ministerio de Hacienda permite a loa Ayuntamientos un déficit del 0,2% del PIB en 2008 y 2009). Aquellos que superen ese nivel estarán obligados a presentar un plan de saneamiento de sus cuentas.
Las intervenciones suscitaron un animado debate. Algunos asistentes se interesaron por quiénes han de ser las autoridades que se encarguen de sancionar a las instituciones que no cumplan los límites al endeudamiento o al déficit. Habida cuenta de la laxitud con que se ha obrado hasta ahora, También surgieron dudas sobre la posición relativa de España para superar la crisis. Si bien algunas voces alertan de las debilidades de nuestro país, algún ponente recordó que aún el Banco de España no ha tenido que intervenir ninguna entidad de depósito y que sus directivos han obrado con la responsabilidad que sería de exigir. Al final de la sesión todos salimos con la convicción de haber adquirido una mejor comprensión de las turbulencias financieras de los últimos meses
De izquierda a derecha: Valentín Azofra (UVA) Julio Pindado (USAL) Enrique López (ULE) y Roberto F. Llera (UNIOVI)